He decidido que voy a ir al Psicólogo, y ahora…
¿Cómo puedo saber cuál elegir?
Te damos una serie de sugerencias para que puedas decidir de una manera informada qué profesional podría ser el adecuado.
¿Quién es el profesional?
Es importante que sepamos a quién vamos a acudir. Actualmente, contamos con una gran ventaja: internet. Simplemente con escribir en un buscador como Google el nombre del profesional al que queremos visitar, podemos obtener información respecto a su trayectoria profesional (participaciones en investigación, colaboración en proyectos, congresos, conferencias, publicaciones). Así mismo, buscándolo por su nombre podemos acceder a las opiniones de otros clientes y ello puede ser de gran ayuda.
Una vez que sabemos quién es y que ha hecho, ¿cómo sé qué formación tiene?
Este aspecto es muy importante, ya que el ejercicio de la Psicología aplicada requiere de una formación especializada y posterior a la Licenciatura o al Grado en Psicología. Además de la formación especializada, por ley, el psicólogo ha de tener una habilitación (En Cataluña, expedida por el Departamento de Salud de la Generalitat) para ejercer en el ámbito de la Psicología aplicada. A la información respecto a la formación, podemos acceder mediante la página web del profesional o del centro en el que trabaja. Allí suele haber un breve resumen de la formación del equipo del centro.
Por otra parte, es imprescindible que se trate de un profesional que esté actualizado respecto a nuevos enfoques, herramientas y modelos en psicoterapia. A día de hoy, el conocimiento es dinámico; constantemente se publican estudios y análisis de casos que informan a los profesionales acerca de qué herramientas funcionan mejor en terapia y frente a qué casos. No es de gran utilidad, acudir a un psicólogo que posea una extensa formación pero que ésta sea muy “antigua”. De la misma manera que cuando acudimos al médico queremos recibir el mejor tratamiento, más actual y seguro, al acudir al Psicólogo hemos de adoptar la misma perspectiva.
En este punto, suele surgir la siguiente duda: ¿Tiene experiencia este profesional?
Hay que ser cuidadosos con esta duda ya que la experiencia profesional no hemos de medirla mediante el tiempo cronológico. Es decir, la buena experiencia profesional no es equivalente a muchos años ejerciendo la profesión. Podemos encontrarnos un Psicólogo que lleve ejerciendo 15 años, y que no haya sido adecuadamente supervisado, que no esté actualizado en nuevos conocimientos y modelos en psicoterapia, y que lleve cometiendo errores durante 15 años.
Lo principal es que el profesional tenga una trayectoria en el área de la Psicología aplicada (o psicología clínica), que sepa manejar nuestro caso, y sobre todo que sea un buen profesional. El problema de saber si el Psicólogo es un buen profesional o no, es que hasta que no tengamos la primera visita o hasta que alguien nos de referencias del mismo, no lo vamos a poder saber. Una manera de abordar este problema, es llamar al sitio de trabajo del Psicólogo o acudir al mismo. Así, podríamos valorar en primera persona el trato que recibimos por parte de los profesionales del centro (que nos dediquen tiempo, no nos presionen a pedir una visita).
Hemos de saber también dos aspectos que son claves para tener un resultado exitoso con la terapia: dónde y cómo trabaja el Psicólogo.
Por una parte, es preferible que el Psicóloga forme parte de un centro en donde existan otros profesionales del ámbito de la salud mental. Los Psicólogos que trabajan en centros suelen realizar sesiones clínicas en las que se comentan y supervisan los casos entre los profesionales del centro.
Como clientes, esto nos da la seguridad de que nuestro caso está siendo enfocado correctamente y desde la perspectiva de un equipo de profesionales.
Por otra parte, es importante que sepamos cómo trabaja el Psicólogo; un buen profesional suele seguir el siguiente esquema de trabajo:
– Para que nuestro caso sea abordado correctamente es necesario que se destinen las 2 o 3 primeras sesiones a valorar el caso o la problemática presente.
– Posteriormente se procede a explicarle al cliente un análisis del caso en el que se suelen indicar las posibles causas del problema, y los factores que lo mantienen.
– Luego se pasa a negociar con el cliente qué objetivos a corto plazo son los que quiere alcanzar y se le explica qué dinámica se seguirá en las sesiones.
– Es imprescindible que a medida que avanzan las sesiones, el Psicólogo otorgue pautas y ejercicios para casa (tareas entre sesiones). Con estos ejercicios, que se adaptan a las necesidades y características del cliente, se están generalizando y ampliando las herramientas personales que se han ido adquiriendo.
También podemos hacernos una idea de qué enfoque siguen los profesionales del centro visitando el blog de su página web. En los blogs podemos apreciar el enfoque que tiene cada profesional mediante la temática y el tipo de post que publica. Si nos agradan sus explicaciones y la perspectiva que leemos en los blogs, es muy probable que nos agrade el método de trabajo de estos profesionales.
Hay muchas ofertas en Psicología, ¿puedo escoger el Psicólogo según el precio de la visita?
La respuesta es claramente: No. Muchas veces, la economía aprieta y miramos muy bien dónde gastar nuestro dinero. Hemos de tener en cuenta que el Psicólogo realiza un trabajo altamente cualificado que conlleva una gran responsabilidad. La oferta de Psicólogos es muy amplia, con lo cual, pensar que el que más cobra es el mejor y el que menos no es tan bueno, no es correcto.
Muchos sitios ofrecen una primera visita gratuita. Como para cualquier trabajador, al Psicólogo le es difícil poder destinar horas de su jornada de trabajo a visitas que no son remuneradas. Con lo cual, aunque la primera visita sea algo tentadora, pagando por la primera sesión, nos aseguramos de que se nos dedique la atención y el tiempo que sean necesarios.
Quiero escoger un Psicólogo que me garantice cuántas sesiones he de ir y cuándo se solucionará mi problema.
Este punto se refiere a la duda sobre la cantidad de sesiones que son necesarias. Hemos de tener muy claro que no existe un número de sesiones que sea fijo, el número de sesiones depende del caso en concreto, la cantidad de aspectos que se han de trabajar en terapia, y sobre todo, la frecuencia que tienen las visitas.
Es decir, es importante que es Psicólogo no nos asegure que en X sesiones ya estará solucionado el problema, porque como profesional no tiene modo de saber cuántas sesiones serán. Lo que sí sabemos es que cuando la frecuencia de sesiones es semanal, los avances son más rápidos que cuando las sesiones son más espaciadas en el tiempo.
Por otra parte, un buen Psicólogo irá espaciando las sesiones (normalmente a partir de la 5ta o 6ta sesión si son semanales) a medida que va trabajando con su cliente. La razón de esto es que se busca que el cliente ponga en práctica los nuevos conocimientos adquiridos sobre sí mismo y su problema ; que ejercite sus nuevas herramientas personales; y poco a poco se vaya desligando de la relación terapéutica. Es de suma importancia que sepamos que los tratamientos psicoterapéuticos no han de ser indefinidos ni de una gran extensa duración.
A modo de conclusión:
Existen una serie de datos que nos indican cómo escoger un Psicólogo que sea un buen profesional. Una parte de estos datos podemos conocerlos antes de la primera visita, mientras que otra parte de ellos, no.
La mejor fuente de información es solicitar una primera visita y conocer al profesional, que nos explique cómo trabaja y qué cree que se puede hacer en nuestro caso. Hemos de analizar si es una persona que no nos juzga, que nos hace sentir comprendidos, nos da el espacio que necesitamos para plantear nuestra problemática y que sobre todo, dedicará unas sesiones a la valoración de nuestro caso. Ya que con una primera visita no se obtiene toda la información necesaria para plantear objetivos terapéuticos y un esbozar un plan de trabajo.
Julia Marquez Arrico (Psicóloga)