En la actualidad el concepto de adicción no se refiere solo a adicciones a sustancias químicas, sino que también se utiliza para explicar aquellos casos en los que una persona se “engancha” a un comportamiento o actividad. Nos referimos a que cualquier conducta normal placentera puede ser susceptible de convertirse en un comportamiento adictivo. Se podrían hacer usos anormales de una conducta en función de la intensidad, de la frecuencia o de la cantidad de dinero invertida y, en último término, en función del grado de interferencia en las relaciones familiares, sociales y laborales de las personas implicadas. Uno de los componentes fundamentales de los trastornos adictivos son la pérdida de control y la dependencia, y estos no solo se observan en las adicciones a sustancias psicoactivas o drogas. Las personas que presentan una adicción conductual son aquellas que no pueden resistirse y se dedican a esta actividad de forma creciente y descontrolada, llegando incluso a entrar en conflicto con sus objetivos personales y familiares, impidiendo en la mayoría de los casos el desarrollo de una vida normal. Entre las adicciones conductuales o comportamentales más frecuentes encontramos adicción a internet, juego, compras, sexo y trabajo. En este artículo, explicaremos qué es la adicción a internet, que consecuencias trae y cómo es posible ofrecer un tratamiento para este problema.
Uno de los acontecimientos más llamativos durante nuestra última década sigue siendo el creciente impacto del uso de las nuevas tecnologías en nuestros estilos de vida y en general, en nuestra sociedad. Pero, en paralelo a la transformación y ventajas que proporciona el uso de Internet como medio de información, como facilitador de las relaciones sociales, y en general, como instrumento de ocio y de interacción, también aparece la noticia de las consecuencias del abuso en la utilización de este medio.
Dentro de las principales consecuencias negativas que puede traer un uso descontrolado de internet se encuentran:
- Reducción de la cantidad y amplitud de nuestros los círculos sociales, ya que las amistades creadas en la red parecen ser más limitadas que las respaldadas por una proximidad física, y por tanto se perjudica nuestro bienestar psicológico.
- Privación de sueño. La privación de sueño se produce por la inhabilidad de la persona para cortar la conexión, permaneciendo despierto hasta altas horas de la madrugada, lo cual podría dar lugar a fatiga, debilitación del sistema inmunitario y un deterioro de la salud.
- Cambios psicológicos negativos, consistentes en alteraciones del humor, ansiedad o impaciencia por la lentitud de las conexiones o por no encontrar lo que se busca o a quien se busca, estado de conciencia alterado (total focalización atencional), irritabilidad en caso de interrupción, incapacidad para salirse de la pantalla, etc.
El tratamiento para los casos de adicción a internet, debe ser personalizado y diseñado para cada caso en concreto. No obstante, en general los tratamientos para estos casos tiene como objetivo el aprendizaje del uso controlado del ordenador, Internet y videojuegos, asumiendo que en las adicciones tecnológicas no es un requisito terapéutico la abstinencia total, sino centrarse en la promoción de un uso adaptativo.
A grandes rasgos el tratamiento suele contar con diferentes fases como por ejemplo:
Fase 1. Fase Motivacional y de Valoración psicosocial.
Fase 2. Fase de Superación del Deseo y Síndrome de Abstinencia.
Fase 3. Fase de cambios conductuales y actitudinales.
Fase 4. Fase de consolidación y prevención de recaídas.
Es importante que los casos de adicción a internet, se diagnostiquen como tales y que el tratamiento para este problema comience lo antes posible. El equipo de profesionales de Neuroespai está disponible para brindarte consejos, ayuda e información respecto a este tema. De este modo, se previenen otros trastornos secundarios y se mejora con rapidez nuestra calidad de vida.
Julia Marquez Arrico (Psicóloga Neuroespai)